Los gobernadores definirán las leyes aprobadas en el Senado. Qué quiere ese sector de la política, ambiguo y sin liderazgo nacional pero con mucha capacidad de veto. Con la opinión de la consultora Shila Vilker, el diputado nacional cordobés Carlos Gutiérrez y la periodista legislativa Verónica Benaim.
Por Mariana Portilla (@mportilla89) y Nicolás Poggi (@PoggiNico)
Ilustración: Juan Soto
Agenda legislativa propia, distancia de “la grieta” nacional, tiempismo en la negociación y búsqueda de liderazgos propios en momentos de definiciones electorales. Los gobernadores definen la negociación en el Congreso, donde el gobierno de Javier Milei viene de sufrir duros reveses.
Tras la sanción en el Senado de los proyectos de aumento jubilatorio y moratoria previsional; de emergencia en Discapacidad y, sobre todo, de redistribución automática de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y del impuesto a los combustibles líquidos, la expectativa está puesta ahora en la Cámara de Diputados, donde los legisladores que responden a estos gobernadores tendrán un rol central a la hora de definir una posición que podría inclinar la balanza hacia uno u otro lado de los deseos de la Casa Rosada.
“Reivindico la rosca”, había advertido alguna vez, en el ocaso del gobierno de Cambiemos, el por entonces presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó. Una apuesta por la negociación política y la búsqueda de acuerdos que los jefes provinciales de distinto signo político parecieran estar ahora asumiendo como propia.
En esa lista se inscriben los gobernadores Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy) y Alfredo Cornejo (Mendoza), que estaban en Juntos por el Cambio pero hoy no tienen referencia nacional; el peronista Martín Llaryora (Córdoba); los radicales Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Leandro Zdero (Chaco); el sanjuanino Marcelo Orrego y los patagónicos Alberto Weretilneck (Río Negro) y Rolando Figueroa (Neuquén), los mayores cultores del provincialismo porque detentan el poder desde expresiones políticas locales.
Con el diálogo cortado con el Gobierno y después de haber hecho una demostración efectiva de poder en el Senado, esta alineación heterogénea que asoma como una nueva “especie política” tiene en sus manos la posibilidad de ratificar su naciente autonomía o terminar cediendo en la negociación con el Poder Ejecutivo.

¿Puede hablarse entonces de un nuevo actor en el sistema político? Para Shila Vilker, analista de opinión pública y directora de la encuestadora Tres Punto Zero, los gobernadores “reconfiguraron” su injerencia. “El rol central que adquirieron durante el gobierno de Milei, y en especial en los últimos meses, los ubica en un espacio que resulta clave para la gobernabilidad. Esto se debe en parte a que La Libertad Avanza no posee una estructura nacional organizada, no tiene territorio ni mayoría parlamentaria, y busca entonces el apoyo político en los gobernadores aliados, quienes resultan ser claves para la gestión. En reemplazo de un sistema de partidos fuertes, hay una red de gobernadores que negocian leyes, presupuestos, obra pública y hasta candidaturas”, dijo en diálogo con Malas Palabras.
“Los gobernadores reconfiguran su injerencia. El rol central que adquirieron durante la gestión de Milei, y en especial en los últimos meses, los ubica en un espacio que resulta clave para la gobernabilidad”
Shila Vilker, analista de opinión pública y directora de la encuestadora Tres Punto Zero.
En los términos en los que lo plantea el escritor Jorge Asis, es una pelea que marca un “sinceramiento del poder”. “Menos Axel Kicillof, los gobernadores hasta aquí actuaron como dadores voluntarios de gobernabilidad. Con el paso indemne de los meses, la comodidad se transforma en inconveniencia, la fortaleza en debilidad, y los mandatarios quieren plata de los impuestos que les corresponden”, opinó el escritor en diálogo con el medio cordobés La Voz en Vivo.
La agenda en Diputados
La sanción de los proyectos de aumento jubilatorio y de Discapacidad del 5 de junio último ya fue notificada el 21 de junio al Poder Ejecutivo, que a partir de esa fecha tiene un plazo de 10 días hábiles para que Milei pueda vetarlos, tal como ratificó públicamente. Los otros dos proyectos, el reparto de los ATN y de impuestos a los biocombustibles, obtuvieron media sanción en la misma sesión del 5 de junio y deben ser tratados en Diputados por las comisiones de Presupuesto y Energía, en caso de que haya acuerdo entre los distintos bloques de la oposición y los delegados de los gobernadores.
Vilker piensa que, a partir de esas dos últimas iniciativas, puramente económicas, “los gobernadores han comenzado a articularse como un bloque con capacidad propia de negociación e iniciativa legislativa superando las diferencias partidarias que hasta ahora los dividían. Esta dinámica responde a la necesidad de garantizar gobernabilidad en sus distritos, asumiendo un rol más activo en el Congreso e impulsando estrategias comunes para defender recursos federales”.
Con el Congreso en receso hasta el 4 de agosto por vacaciones de invierno, los próximos movimientos legislativos ya se están cocinando fuera del palacio. “La oposición quiere llevar al recinto de Diputados la emergencia en Pediatría, además de rechazar los eventuales vetos de Milei a las leyes de aumento a las jubilaciones y emergencia en Discapacidad. A la vuelta de las vacaciones, los bloques opositores que trabajan en sintonía, como Unión por la Patria, la izquierda, Encuentro Federal y los radicales díscolos de Democracia para Siempre retomarán el trabajo parlamentario imponiendo nuevamente su agenda”, adelantó a Malas Palabras Verónica Benaim, periodista de Tiempo Argentino acreditada en el Congreso.
“La oposición quiere llevar al recinto de Diputados la emergencia en Pediatría, además de rechazar los eventuales vetos de Milei a las leyes de aumento a las jubilaciones y emergencia en Discapacidad. A la vuelta de las vacaciones, los bloques opositores que trabajan en sintonía, como Unión por la Patria, la izquierda, Encuentro Federal y los radicales díscolos de Democracia para Siempre retomarán el trabajo parlamentario imponiendo nuevamente su agenda”
Verónica Benaim, periodista de Tiempo Argentino acreditada en el Congreso.
La mirada desde el interior
Sobre el impulso de los gobernadores a los proyectos de ATN y de biocombustibles, el diputado nacional Carlos Gutiérrez, mano derecha del ex gobernador cordobes Juan Schiaretti, justificó la avanzada en que “el gobierno nacional no está respetando los índices objetivos de coparticipación que rigen ese reparto. Córdoba es parte del reclamo generalizado de todos los gobernadores, con el agregado de que nosotros, como gestión provincial, reivindicamos y practicamos el superávit fiscal desde hace 25 años”.
“El gobierno nacional no está respetando los índices objetivos de coparticipación que rigen ese reparto. Córdoba es parte del reclamo generalizado de todos los gobernadores, con el agregado de que nosotros, como gestión provincial, reivindicamos y practicamos el superávit fiscal desde hace 25 años”
Carlos Gutiérrez, diputado nacional y mano derecha del ex gobernador cordobés, Juan Schiaretti.
A tono con la narrativa económica prudente que caracteriza al peronismo cordobés desde tiempos de José Manuel de la Sota, Gutiérrez señaló a Malas Palabras que “gracias a nuestra política fiscal hemos podido acceder al crédito internacional, por eso ejecutamos casi 8500 millones de dólares de obra pública en los dos últimos mandatos”.

Por eso, afirmó que “si el Gobierno insiste con discutir la baja de impuestos que cobran las provincias, proponemos que sea en el marco del impulso de una nueva matriz tributaria. Podríamos aplicar el modelo de Brasil que contempla un IVA provincial donde la recaudación asignada a las gobernaciones es importante, y donde además se contempla un fondo compensador a las provincias con menos desarrollo”.
Un enfoque regional
Este posicionamientos de los gobernadores presenta similitudes con el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), una influyente fuerza sin ideología política definida pero con mucho respaldo legislativo, lo que obliga a los gobiernos del vecino país a negociar cada proyecto con esa potente bancada.
“El PMDB fue durante décadas en Brasil una maquinaria de gobernabilidad más que un partido ideológico, su función no era disputar la presidencia sino condicionar al que la ocupara, algo similar a lo que ocurre con los gobernadores, quienes actúan como una fuerza centrífuga que no se alinea plenamente con Milei ni con el kirchnerismo, pero que puede garantizar o bloquear la gobernabilidad”, aportó Vilker.
La analista señaló a ese respecto que “al igual que el PMDB, los gobernadores tienen anclaje territorial fuerte y escasa presencia nacional, privilegian el pragmatismo por sobre la identidad ideológica y son claves para que las leyes del gobierno puedan avanzar”.
El Senado en disputa
El Senado tampoco será ajeno a esta disputa. Benaim señala que para la Cámara Alta asoma una dinámica parecida a la de Diputados, aunque está por verse hasta dónde escala el impacto legislativo del distanciamiento entre Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel, además de que la actividad tiene un deadline claro: lo que se haga deberá concretarse durante las primeras semanas de agosto porque después la agenda estará puesta en la campaña electoral para las elecciones legislativas del 26 de octubre.
“Los gobernadores están haciendo algo más que pelear por las arcas provinciales. Desde hace un tiempo se viene gestando un armado nuevo en la política argentina, que puede tener influencia en el Congreso desde 2026 y poner un candidato a presidente en 2027, entre los cuales figuran nombres como los de Torres o Pullaro. Ese armado proyecta un frente político-electoral entre 10 o 12 gobernadores, lo que implicaría un reordenamiento del sistema político”, entiende la cronista parlamentaria.

¿Tiene proyección política este nuevo polo de gobernadores? El peronista bonaerense Axel Kicillof ya mostró voluntad federal con su flamante espacio Movimiento Derecho al Futuro (MDF), mientras desde el cordobesismo -la expresión mediterránea de esa identidad- Schiaretti apuesta por una voz propia en el mapa nacional desde el armado Somos Buenos Aires, una alianza de centro que fue inscrita para las elecciones provinciales del 7 de septiembre.
Pero Vilker advierte que no será tarea sencilla. “Kicillof busca disputar el liderazgo del PJ no solo desde la territorialidad sino desde una narrativa alternativa al kirchnerismo clásico, o a La Cámpora. El MDF tiene como objetivo renovar el peronismo sin romper con el kirchnerismo, pero con intención de superarlo. Su legitimidad electoral en la provincia más grande del país le da una base objetiva, pero al igual que Schiaretti no tiene una coalición nacional construida. Para lograrlo, resulta clave que ambos establezcan relaciones sólidas con el peronismo no kirchnerista”, advirtió.
“Kicillof busca disputar el liderazgo del PJ no solo desde la territorialidad sino desde una narrativa alternativa al kirchnerismo clásico, o a La Cámpora. El MDF tiene como objetivo renovar el peronismo sin romper con el kirchnerismo, pero con intención de superarlo”
Shila Vilker, analista de opinión pública y directora de la encuestadora Tres Punto Zero.
La figura de Schiaretti, en tanto, “funciona como un emergente más centrista y cordobesista, vinculado al federalismo, al orden fiscal y a una racionalidad tecnocrática. Su paso al frente en el AMBA con Somos Buenos Aires intenta construir ese espacio a nivel nacional. Ambos tienen por delante el desafío de construir una alternativa cuyo éxito, como todo en la política argentina, está supeditado a los resultados en el plano económico del gobierno de Milei”, concluyó.
Candidaturas en PBA: un cierre abierto
El cierre de listas en la provincia de Buenos Aires dejó al descubierto no solo los nombres que encabezarán las boletas de septiembre sino también las tensiones internas y los equilibrios precarios de poder dentro de cada espacio. La negociación fue dura, especialmente en el peronismo, que logró mantener la unidad bajo el paraguas de Fuerza Patria, pero con más remiendos que certezas.
En Fuerza Patria, el reparto final fue el resultado de una fuerte pulseada entre el kicillofismo, La Cámpora y el Frente Renovador. El gobernador Axel Kicillof colocó a su ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis, al tope de la lista de senadores por la Primera Sección electoral, una jugada que simboliza la pretensión de su espacio, el Movimiento Derecho al Futuro (MDF), de construir músculo político propio. En la Tercera Sección también se aseguró la cabeza de lista con la vicegobernadora Verónica Magario, secundada por el camporista Facundo Tignanelli y la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, que representa a La Cámpora y a la ex presidenta Cristina Kirchner.
El massismo, por su parte, no logró imponer figuras en los primeros lugares pero colocó algunos nombres con posibilidades de ingreso en secciones clave, como Malena Galmarini en el segundo casillero de la lista de la Primera Sección, tras una negociación en la que Sergio Massa prefirió evitar rupturas. La negociación incluyó a intendentes que se reservaron lugares testimoniales o impulsaron concejales propios en sus distritos, como Jorge Ferraresi (Avellaneda), Juan José Mussi (Berazategui), Andrés Watson (Florencio Varela) y Mario Secco (Ensenada), lo que dejó heridas abiertas en más de un territorio.
Del otro lado, la alianza de La Libertad Avanza y el PRO logró cerrar listas en las ocho secciones con Karina Milei como dueña de la lapicera. En la Primera Sección, el elegido fue el intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, que empezó en política en el PRO pero juega hace meses alineado con Javier Milei. También se destacan Natalia Blanco en la Segunda Sección y Maximiliano Bondarenko en la Tercera. El salto de figuras del PRO a las listas libertarias fue leído como un avance de Milei sobre el viejo aparato macrista y provocó la salida de varios dirigentes amarillos que terminaron formando Somos Buenos Aires.
Ese nuevo espacio, encabezado por la UCR, sectores de la Coalición Cívica y referentes del socialismo y el schiarettismo, presentó listas competitivas. En la Primera Sección, destaca la candidatura del intendente de Tigre, el exmassista Julio Zamora; y en la Tercera Sección, la del diputado Pablo Domenichini, referenciado en Evolución Radical. Con fuerte anclaje territorial y un discurso “anti-grieta”, buscarán posicionarse como una tercera vía moderada frente a la polarización.