Claudio Lozano aseguró que “transformar el sistema tributario es esencial para mitigar la desigualdad”. El economista y actual director del Banco Nación dialogó con la Agencia Paco Urondo Radio (La Palabra Justa, domingos de 10 a 12, por FM La Patriada) sobre el Aporte extraordinario de las grandes fortunas y la necesidad de una reforma profunda del sistema tributario. Aquí compartimos las pasajes fundamentales.
Por Martín Massad
Agencia Paco Urondo: A nivel mundial las grandes fortunas vienen haciendo contribuciones para paliar la situación pandémica y en Argentina se recaudaron 230 mil millones de pesos. El 80% de los grandes aportantes ya acató e hizo su pago, el resto todavía está en veremos ¿Está conforme con la recaudación?
Claudio Lozano: Claramente es un éxito porque el 80% ha pagado sin plantear ningún tipo de problema de carácter judicial. Solamente, es un porcentaje muy reducido el que ha planteado la resistencia en materia judicial a un aporte de esta naturaleza. Es una cuestión que comienza a mostrar el enfoque que debe tener la política tributaria en Argentina. Sigue pendiente una reforma impositiva profunda que efectivamente haga recaer la carga tributaria sobre aquellos sectores de mayor capacidad económica. Claramente en Argentina, los ricos no pagan o pagan muy poco. Cuando se mira la participación que tiene el aporte de los impuestos a los patrimonios dentro del total de la recaudación total, representan apenas el 4% del total. El 66% procede fundamentalmente de impuestos al consumo. El impuesto a las ganancias y el impuesto al patrimonio, finalmente, apenas aportan el 30% de la recaudación. La verdad que esto es exactamente al revés en los países más desarrollados.
APU: Sin embargo se dice siempre que Argentina tiene alto los impuestos.
CL: Han sido tantos los años que han transcurrido donde la AFIP no se ha ocupado en general de cobrarle a los ricos, que los registros que se tienen respecto a las fortunas, en general, son bastante deficitarios. De hecho, los grandes grupos empresarios en Argentina, tanto locales como transnacionales, que son a la vez, los dueños de los principales grupos empresarios de la Argentina, llevan adelante una estrategia de lo que se suele denominar como planificación fiscal nociva. Una construcción de estrategias que les permitan eludir el pago de impuestos. Hay toda una cofradía de contadores, abogados y de estudios, que construyen sociedades tanto en Argentina como el exterior, que van tratando de disimular los patrimonios y las rentas, de manera tal que, la capacidad de eludir de estos actores sea muy alta. Hay un montón de estudios a nivel mundial que dicen que en Argentina, aquellos que tienen más de un millón de dólares son 114 mil personas. Esos serían los millonarios en dólares en Argentina. Cuando se mira los registros que tiene la AFIP de más de un millón de dólares, hay solamente 32 mil. Hay una diferencia sustantiva entre la cantidad de millonarios en dólares que la AFIP tiene registrados de aquellos que están registrados por las consultoras internacionales. Prácticamente el 70% del capital está fuera del país. Hay unas mil personas que efectivamente tienen fortunas superiores a los 30 millones de dólares en Argentina y sería importante que se los incorpore en el aporte de las grandes fortunas.
Y además, tenemos en los estudios que ha hecho el Banco Central durante el último año, sobre quienes fugaron divisas en el período de los 4 años de la gestión Macri, donde se tiene una base importante de empresas y de personas. Se fugaron aproximadamente unos 80 mil millones de dólares. En realidad, el 1% de las personas jurídicas, empresas, bancos, fondos de inversión y demás, concentraron aproximadamente unos 46 mil millones de dólares de fuga. Y 1% de las personas humanas que son unas 60 mil personas, concentraron otros 20 mil. O sea que el grueso de la fuga está concentrada en muy pocas empresas y personas.
Esas personas y esas empresas son una buena base para ver, en qué medida lo que fugaron tiene que ver con lo que habían efectivamente declarado en términos de rentas y patrimonio obtenidos a la AFIP durante esos años, y en qué medida no.
No hay que temerle a esta discusión, Argentina tiene una presión tributaria absolutamente normal. Lo que sí es cierto es que la composición de la recaudación es fuertemente injusta, porque termina cayendo sobre los sectores medios y populares, mientras que los grandes eluden permanentemente y no pagan.
Hay que avanzar en esa dirección, porque dar vuelta la característica del sistema tributario es un aporte fundamental a condiciones de mayor igualdad en nuestro país. En un país de fuerte concentración de la riqueza como es la Argentina posterior a la dictadura en donde se ha ido afirmando una Argentina profundamente desigual, uno de los instrumentos para mitigar esa desigualdad y para poder fortalecer, aparte, la capacidad de intervención del Estado y la posibilidad de financiar servicios públicos que garanticen salud, educación, justicia y seguridad al conjunto de la población, es el sistema tributario progresivo.
…Hay estudios de la AFIP que muestran que los millonarios de la Argentina terminan pagando en promedio no el 35%, que sería lo que les correspondería, sino el 16%.
Este tipo de cosas son las que hay que impedir, porque el caso nuestro es un caso tal, donde hasta los impuestos que supuestamente son progresivos, como el impuesto a las ganancias o el de los bienes personales, tienen diseños que hacen que de repente los terminen pagando los sectores medios en lugar de que los paguen los sectores de mayor capacidad económica. Recién este año se aprobaron en el parlamento, la suba del mínimo no imponible en ganancias, que liberó a 1.200.000 trabajadores de pagarlo, y por otro lado, se modificó el sistema por el cual se grava con ganancias a las empresas, estableciendo una segmentación para que las más grandes paguen más.