Por Carlos Fanjul.- El tipo te pone cara sonriente y gesticula derrochando amabilidad.
Te emboca seguro, porque tiene algo como pacificador en sus maneras.
Ah, vos decís que no es tan así….Explicame entonces como hizo para que, además de creerle sobre sus buenas intenciones, ¡¡lo votaron en masa para que nos gobierne a todos!!…
Resulta que ahora aparece una investigación internacional y queda pegado a cuentas oscuras en paraísos fiscales, y, aún así, el tipo te pone esa carita angelical y vos te sentís un otario por haber pensado mal de él.
En realidad, sos un otario porque pensás que sos un otario al condenarlo…
Ahora, igual, ocurre algo raro después de eso.
Como el tipo es empresario de toda la vida, -la suya y la anterior de su familia-, a nadie le parece muy jodido que ande haciendo maniobras para ganar unos mangos más. Si eso es lo que hacen todos los empresarios, razonamos.
Y lo naturalizamos…
Y ahí nos emboca de nuevo…
Es jodido reconocerlo, pero la justa la escribió el zigzagueante operador moderno de Jorge Lanata: “Macri reacciona de modo torpe y confiado: como es legal no tengo nada que explicar. Reacciona como un millonario y no como un presidente. Marcos Peña –que parece ser la única persona a la que escucha– debiera explicarle la diferencia entre verdadero y verosímil: aun cuando su empresa hubiera tenido como objetivo reunir fondos para el comedor de Margarita Barrientos, una offshore en Panamá es sinónimo de evasión de impuestos”.
Ahí está la clave de lo que debemos razonar!.
Qué me importa si operó o no operó, o si su nombre era el principal o el de actor de reparto!. Esas cuentas o son para pagar menos impuestos (¿evadir?), o para ocultar dinero en alguna operación (¿lavar?).
En cualquier caso, y más allá de que luego se use o no esa cuenta, como aclaró Mauri en su caso, la intención no es transparente. No se porque aceptada socialmente cuando la ejecuta un empresario, pero indignante cuando ese mismo tipo es tu presidente.
Y ahí viene la otra parte de esta triste ficción que vivimos.
Los K recuperan el aliento, y como Mauricio pasa a ocupar el lugar de presidente inmoral, su reina Cristina parece serlo menos.
Y ahí juegan unos y otros, tirándose acusaciones sobre la estrellita rival y haciéndose los tontos con las que le llegan a la propia.
¿Quién es peor? ¿Mauricio o Cristina?…Y a mi que me importa, si, de comprobarse cada denuncia, ellos engordaron las arcas propias, mientras, en paralelo, toman o tomaron medidas de gobierno que nos vaciaron el bolsillo nuestro.
O cómo tengo que anotar que ella haya vetado el proyecto del 82 por ciento para los jubilados ‘porque sino el sistema iba a estallar’, o precarizado el trabajo de tantos para dibujar los números de desocupación?. ¿O como te cabe que después de 12 años vos sigas con la guita justa, mientras Chevrón y la Barrick Gold no dejaron de llevársela en pala?
O que el de bigotito me despida, me persiga o me otorgue un aumento del 15 por ciento en el sueldo, mientras me comunica que tengo que pagar un impuesto con 150 de incremento?.
Muchachada: No hay que permitir que nos confundan la discusión.
Siempre es Ellos o Nosotros.
Aunque lo hayas votado.
Aunque quieras seguir haciéndome sentir como un otario y mirés para un costado de la clase laburante a la que pertenecés.