Con motivo del Día Internacional de las Mujeres, que en la Argentina provocó una movilización popular que colmó las calles de cada ciudad, la Marcha Mundial de Mujeres emitió una declaración en el que reafirmaron que seguirán su rumbo “hasta que todas seamos libres de toda la opresión patriarcal capitalista y colonial”. Denuncian la violencia de la que son objeto y la desigualdad en materia de derechos laborales. En suma, cuestionan el esquema del mundo que las somete a escalones inferiores en todo sentido. Aquí los conceptos principales del texto.
Denunciamos y resistimos frente al contexto político mundial, marcado por la creciente crisis económica, social, política, climática e ideológica, en definitiva, denunciamos el estado de guerra total donde nosotras, mujeres, ¡somos las principales afectadas!
Denunciamos los argumentos económicos y nacionalistas como forma de privarnos del ejercicio de derechos y libertades fundamentales y, como consecuencia, el boicot a la autonomía de las mujeres y los pueblos. Rechazamos todas las políticas de los gobiernos de derecha, que, cada vez más radicales, expresan odio, racismo, misoginia, intolerancia y demás formas de discriminación. Nos mantenemos firmes y en lucha contra la criminalización de los movimientos sociales. La lucha por nuestros Derechos y libertades es una forma de expresión justa, por lo tanto: ¡NO SOMOS CRIMINALES! Seguiremos en las calles y en solidaridad con nuestras compañeras asesinadas, perseguidas y privadas de su libertad y acción política.
Denunciamos y enfrentamos el avance de la militarización en todo el mundo como estrategia de control de la vida de los pueblos. La militarización refuerza el neocolonialismo, el neosaqueo y la apropiación del capital sobre los recursos naturales y es un soporte de enriquecimiento para la industria de armamento frente a la crisis. Además del permanente estado de guerra en Medio Oriente y África. Nos preocupan los movimientos de las potencias militarizadas del Norte que indican una amenaza de retorno a la guerra fría y la continua interferencia en los países del sur intentando promover el modelo de democracia neoliberal nórdico como la meta alcanzable.
Denunciamos los acuerdos de libre comercio, que empobrecen cada vez más a los pueblos del sur global. La apropiación, privatización y mercantilización del conocimiento, de la tierra, el agua, la salud, la educación y demás bienes comunes, agudizan las condiciones de explotación en el trabajo de las personas empobrecidas y dejan sin oportunidades a las futuras generaciones, perpetuando el círculo de la pobreza. La industria extractiva y el agronegocio siguen degradando nuestra salud y nuestras condiciones de vida, mientras las élites políticas acumulan una riqueza basada en la corrupción y la impunidad. Reafirmamos que seguiremos sacando nuestros cuerpos a la calle para enfrentar la situación.
Denunciamos un mercado que explota y precariza las condiciones de trabajo de las mujeres con largas jornadas de trabajo, bajos salarios y exposición a riesgos diversos; denunciamos la precarización del trabajo doméstico y de cuidados.¡Un trabajo invisibilizando e infravalorado! Cuestionamos la división sexual del trabajo que sobrevalora el trabajo socialmente concebido para los hombres a partir de la negación del valor del trabajo atribuido a las mujeres. El trabajo ejercido por las mujeres es la base para sostener la vida y por lo tanto, una importante fuente de contribución económica. Exigimos el reconocimiento del valor del trabajo doméstico, pues las contribuciones económicas van más allá de lo que puede ser monetizado.
Denunciamos y seguiremos denunciando siempre todas las formas de violencia porque, no olvidamos la violencia machista que enfrentamos cotidianamente en espacios públicos y privados. Gritamos bien alto ¡BASTA! Basta de abusos, violaciones, matrimonios forzados y feminicidios que no suceden únicamente en países de Asia y África, sino que están presentes en las vidas de las mujeres de todas las clases y en todo el mundo. Nuestros cuerpos y nuestras vidas nos pertenecen y ese derecho no es negociable.
Enaltecemos, apoyamos y participamos en iniciativas para acabar con el silencio, como son los recientes movimientos de denuncia y de ocupación del espacio público: Marcha das Mulheres, Time´s up, #metoo, ¡Ni una a menos!, ¡Vivas nos queremos! y la Huelga Internacional de Mujeres, así como en iniciativas que se suman a las luchas permanentes que venimos tejiendo contra la opresión del sistema patriarcal, capitalista y colonialista.
Enaltecemos las luchas y resistencias de las mujeres que trabajan a nivel local construyendo nuevas narrativas y reescribiendo la historia de las poblaciones marginalizadas, manifestando la diversidad y multiculturalidad de los pueblos, la solidaridad como estrategia de subversión del sistema actual y como estrategia de humanización, contribuyendo así para la transformación de las sociedades, haciéndolas más justas e iguales.
Seguimos rumbo al XI Encuentro Internacional donde del 22 al 28 de Octubre, en el País Vasco, construiremos colectivamente utopías y alternativas, ¡para marchar por un Mundo de justicia, libertad y paz!
¡Seguimos transformando nuestro dolor en fuerza! ¡Seguimos confiando en la Solidaridad y el trabajo colectivo! Seguimos en Marcha , Mujeres…
¡Siempre!
Locas (Jack Kerouac)
Brindemos por las locas, por las inadaptadas
por las rebeldes, por las alborotadoras,
por las que no encajan,
por las que ven las cosas de una manera diferente.
No les gustan las reglas y no respetan el status-quo.
Las puedes citar, no estar de acuerdo con ellas,
glorificarlas o vilipendiarlas.
Pero lo que no puedes hacer es ignorarlas.
Porque cambian las cosas.
Empujan adelante la raza humana.
Mientras algunos las vean como locas,
nosotras vemos el genio.
Porque las mujeres que se creen tan locas
como para pensar que pueden cambiar el mundo son las que lo hacen.»
Y usted preguntará por qué paramos
por Bárbara Arias * Secretaria de Prensa y Difusión del Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren-CTA)
“¡Por Dios, Lucía, por Dios!”, gritó la vieja rezongona cuando la vio aparecer con el pelo revuelto, las rodillas raspadas y el vestido sucio con barro, y siguió: “¿Que voy a hacer con vos?”
«¡Mirá que linda la muñeca! Bajate de ese árbol. Dejá esa pelota. Parate derecha. Desenredate el pelo. No te ensucies la ropa. Ese juego es para varoncitos. Las nenas no dicen malas palabras. Las nenas no gritan. Las nenas usan pollera. Mirate las rodillas, todas raspadas. Vos no podés ir a pescar con tu papá, eso es para tu hermano. Cerrá las piernas. Sentate bien.
No corras. No saltes. Vos no podés. Vos no sabés. Devolvele la bici a tu hermano. Ayudame con las compras. Podrías levantar la mesa, no? Ya sos una señorita, me podrías ayudar más en la casa. Poné la mesa. Levantá la mesa. Lavá los platos. Secá los platos y guardalos. Tu hermano es varón, él hace otras cosas.
¿Así vas a salir vestida? ¿Viste cómo se vino vestida? Pareces una puta. Dame un beso. Te hacés la dura y mirá como te vestís. ¿Me vas a decir que no querés? Es una puta. ¡Es re puta! Después querés que te respeten, mírate la pinta. ¡Vení, si te re gusta! Epa, que bien te queda el uniforme. ¡Qué buen culo! ¡Qué gomas, mamita! Escuchame, acá el jefe soy yo. Vení que el aumento lo vamos a discutir en mi oficina. Qué cara de culo, ¡seguro que anoche no te atendieron! ¡Es una mal-cogida! ¡Vos lo que necesitás es una buena poronga!
Che, ¿y vos no pensás tener hijxs? ¡Tiene como cinco hijxs, todos de distinto padre! Sigue pariendo críxs para cobrar un plan. ¿Sabías que abortó? ¿En serio estás a favor del aborto? ¿Viste?… ¡está a favor del aborto! ¡Cogen como locas y después abortan! Si abortó es una hija de puta, y puta, como no se muere. Si no quieren hijxs, cierren las piernas. A mi no me vengas con esa.. ¡la violaron porque se viste como una puta!
Vos quédate en la casa porque tus hijxs te necesitan. Los niñxs se tienen que criar con la madre. La madre es el pilar del hogar. ¡Quieren igualdad de género pero no pagan una cena! Las feministas son feminazis. Las feministas son todas tortas ó putas. Las feministas son feas y gordas. Piden ni una menos, mejor nadie menos. ¿Paro de mujeres? Andá a lavar los platos, secalos, guardalos. Seguro es mina, ¿viste como dobló?
Che, pero en serio.. ¿Paro de mujeres? ¿Y ahora qué quieren? Seguro que es por el aborto. Les encanta abortar. Abortan por putas. La mataron por puta. La contrataron por puta. La echaron por ñoqui.. y por puta».
Si alguna vez, en algún momento de tu vida escuchaste alguna de estas frases, tenés razones de sobra para entender porque salimos a la calle el 8M.